Trabajo de forma muy cercana.
Me gusta hacer encuentros informales con los novios, conocerlos mejor, y me cuenten qué tipo de boda tienen en mente y qué necesitan. ¡Durante estas reuniones surgen las mejores ideas!
Tras la primera reunión elaboro un presupuesto totalmente personalizado y ajustado a las necesidades de la pareja. Generalmente durante los meses de preparación previos al día de la boda surgen nuevos pequeños detalles que intento asumir de manera que los novios saben en todo momento cuánto dinero van a invertir en su boda. ¡Sin sorpresas al final!
Mantengo un contacto diario con los novios para ayudarles en todo lo que necesiten… tanto que se crea una relación muy cercana que dura más allá del día de la boda.